Mal ambiente en Ferrari tras el Gran Premio de Hungría
La falta de resultados genera hostilidades
Fernando Alonso y Luca di Montezemolo/ lainformacion.com
Las vacaciones en Ferrari no van a ser tan 'bonitas' como se podrían haber imaginado al principio de la temporada ya que llegados al ecuador de la temporada los resultados son bastante peores de lo que se esperaba para estas alturas del año.
El Gran Premio de Hungría de Fórmula 1 puede haber supuesto un antes y un después para los integrantes del equipo Ferrari ya que las declaraciones de un Fernando Alonso algo decepcionado -por decirlo de alguna manera- han desencadenado un buen número de reacciones, siendo la más significativa la de Montezemolo, mandamás del equipo.
Al terminar la carrera Fernando Alonso aseguró que los Red Bull estaban por encima de los Ferrari, pero no sólo los Red Bull sino también los monoplazas de Mercedes y Lotus, tal y como quedó reflejado en la clasificación al término de la prueba. Esto parece que no ha sentado especialmente bien en el seno de la 'Scuderia' lo que ha llevado al máximo responsable a dar una reprimenda al piloto asturiano. Montezemolo ha asegurado que "a todos los grandes campeones que pilotaron para Ferrari les he pedido siempre anteponer los intereses del equipo a los personales". A esto, Montezemolo ha querido añadir que en estos momentos hay que mantener la calma y estar junto al equipo y sus hombres tanto dentro como fuera de la pista. Con esto lo que quiere dejar claro es que este es un momento de cierta complicación porque las cosas no están saliendo como se esperaba, motivo por el cual ahora es cuando más unido debe estar el equipo.
Tras esta 'reprimenda' en Ferrari también son consciente de la situación que se vive a nivel deportivo, de manera que van a trabajar durante el verano para conseguir soluciones y lograr que el F138 obtenga los resultados esperados a partir de la próxima prueba. Parece que durante tres días el equipo estará haciendo tests en Magny-Cours para lograr encontrar respuestas.
Pedro Martínez de la Rosa será quién se ponga a los mandos de uno de los Ferrari de temporadas anteriores (el de la campaña pasada concretamente) para lograr encontrar soluciones. El problema reside en que los datos de los simuladores no son los mismos que los ingenieros obtienen con el monoplaza en la pista, de manera que Pedro de la Rosa va a tener que trabajar mucho para ayudar al equipo durante las vacaciones de verano.
Veremos si el verano sirve para que se calmen los ánimos, que parece que en Ferrari están bastante caldeados.