Un Mundial muy nacional
El trabajo de la cantera llena el campeonato
Héctor Faubel
El Mundial de motociclismo de 2010 será recordado como uno de los más importantes en la historia del deporte español gracias a los tres títulos de campeones que sumó el país. Marc Márquez, Toni Elías y Jorge Lorenzo establecieron un nuevo hito en el motociclismo español, que afronta la nueva temporada con las esperanzas renovadas y la tranquilidad de que la repetición es más que factible.
El trabajo que se hace desde el Campeonato de España y las categorías de promoción de jóvenes pilotos se ve plasmado en el Mundial, donde ahora mismo coinciden 22 pilotos españoles, más de un 25% de los 86 pilotos que pueblan las tres parrillas del campeonato.
La mayor presencia de pilotos se observa en la categoría de 125, donde nueve corredores de los 31 que participan en la clase más pequeña por cilindrada son de España. Nico Terol, Héctor Faubel, Efrén Vázquez o Sergio Gadea son algunos de los principales candidatos al título. Pero tras ellos llega una gran cantidad de pilotos, jóvenes pero preparados para la acción, surgidos todos del CEV.
Alberto Moncayo, Maverick Viñales, Adrián Martín, Joan Perelló y Luis Salom completan la alineación española, un conjunto de garantías que puede prolongar la racha de victorias nacionales que interrumpió el británico Bradley Smith en Valencia.
Es evidente que el trabajo de la cantera, la proliferación de circuitos y el interés de las empresas y los espectadores españoles han marcado este boom en el motociclismo nacional, plasmado en la proliferación de la bandera nacional en las listas de inscritos de las tres categorías.
Porque si en 125 son nueve los pilotos que participarán en 2011, en Moto2 no será menor la presencia de pilotos. Ocho corredores, que podrían haber sido nueve si no llega a retirarse Fonsi Nieto, intentarán revalidar para el país el título de Toni Elías, ya que este ha dado el salto a la categoría grande.
Precisamente son dos españoles, Julián Simón y Marc Márquez, los que más suenan como sucesores del piloto catalán. Junto a ellos, Xavi Forés, Tito Rabat, los hermanos Aleix y Pol Espargaró, Áxel Pons y Ricky Cardús completan la alineación más abultada de un país en Moto2.
El número de pilotos en esta categoría reafirma que la entrada incesante de pilotos españoles en el Mundial no se queda en la base, sino que se observa una evolución y una mejora en sus carreras y trayectorias con el paso a categorías más grandes y exigentes.
Pero de Moto2 a MotoGP, el paso se vuelve más exigente. Hay que destacar mucho entre el resto de pilotos y esperar a que quede un hueco entre los grandes para dar el salto. Hace ya cinco años debutó el español con más años consecutivos en la máxima categoría, Dani Pedrosa. Tras él llegó Jorge Lorenzo, el único con un título mundial de MotoGP.
Álvaro Bautista y Héctor Barberá llegaron de la mano la temporada pasada y comienzan ahora su segunda campaña mientras que a Toni Elías se le puede considerar como un recién llegado o como un veterano que empieza su sexta temporada con las motos más grandes.
La presencia española, por fin, tiene a algún rival en cuanto a número. Italia cuenta con cuatro pilotos en la máxima categoría y casi iguala en cifras a España. Aquí se ha tenido que ir ganando poco a poco el peso que le corresponde al motociclismo nacional, al que le costaba llegar arriba del todo.
Desde fuera se critica la masificación de la parrilla con pilotos de una misma nacionalidad y se responsabiliza a la empresa organizadora del campeonato, Dorna, de este hecho. Pocos recuerdan ahora el dominio estadounidense y australiano de las décadas anteriores.